suspendida por ahora

No me ha gustado como ha quedado la trama, hay muchos detalles ultimamente le he dado otro giro al a historia q creo q lo hara mas entretenida y menos lenta...

Capitulo 2: La Huida


A lo lejos divise a mi madre con la otra mujer de mi Padre y sus hijos[1].

Mi padre estaba en el techo de la Ruka, ayudando a mi Tío a entecharla.

Minchequeo conversaba con otro hombre y miraban fijamente un punto, seguí su a sus ojos y encontré a Pire, afirmada a un árbol jadeando con dificultad, tratando de disimular su dolor. En ese momento me di cuenta que no podríamos huir tan fácilmente pues estaríamos siendo observadas. 

Teníamos que alejarnos de la vista de Minchequeo, y de mis padres, debíamos alejarnos de lof (comunidad).

Corrí a donde mi madre y le dije. Mamita, me da permiso para ir a nuestra Ruka, podría cocinar algo para cuando regrese la familia. Pire me podría ayudar, le dije con una sonrisa.

Hija, es un buen momento para que conozcas algún joven. De nuestra lof. Te deberías quedar. Me gustaría que pidieran tu mano, antes que te raptaran[2]. Ya estás en edad de formar una familia. Y sería una buena oportunidad para que tu padre establezca una alianza con la familia de tu futuro esposo… Hijita eres tan bella, no deberías desaprovechar esta oportunidad, mientras acariciaba mis trenzas.

Mire con extrañeza a mi madre, ¡De que estaba hablando, en pocas horas matarían a mi hermana  mayor, y ella está preocupada de buscarme marido!

Por dentro me sentía tan indignada, tenia gana de gritarle, escupirle, estos sentimientos me sorprendía, pues ella era mi madre, pero el temblor de ira que sentía que exploraría contra ella no aminoraba… contrólate Huilen… cálmate, me dije. Respire, y casi ahogada le contesté:

-Oh, mamá dices eso porque me amas, al lado de Pire soy un feo sapo... Además siempre hay mingakode en que participamos, y estoy segura que papá y usted encontrarán algún candidato adecuado para mí y mi lamnge.- Y a duras penas esboce una sonrisa.

Mi madre, me miro y busco a Pire, cuando la vio, un brillo de miedo cruzo por sus ojos. Está bien,  dile al hijo de tu padre Neculman que las acompañe, no quiero que estén solas… puede llegar wingkas[3] -

Maldición no nos quiere dejar solas pensé, pues tanto Pire como yo, éramos diestras en el uso del algunas armas, siguiendo la tradición de la toki[4] Anuqueupú[5], mi madre sabia que nos podíamos defendernos perfectamente… esto dificultaría las cosas- pero no lo suficiente para truncar mi plan. -Si mamita-.  Le dije con mi mejor cara de hija buena.

Corrí donde Pire, y le dije -Vámonos a la Ruka, hermana-.
Pire debió intuir algo pues busco mis ojos preguntando con ellos, y creo entendió que algo serio ocurria, pues me acompaño en silencio..

En el camino, nos acercamos a Neculman. –Hermano- le dije. -Mi madre te pide que nos acompañes a la Ruka.

Neculman, frunció el seño. - ¿Por qué no pueden ir solas?

-Mi madre teme que lleguen wingkas, no quiere que estemos solas. Acompáñanos hermanito, te preparé un poco de chicha[6] y podrás descansar un poco mientras cocinamos a la familia.

Neculman, respondió: si llegará un wingka, podríamos intercambiar cosas... nos harían un favor, dijo…

Pire y yo miramos con desdén a mi hermano, lo despreciábamos por admirar a los wingka. Neculman no se percato de nuestro fastidio, y continuo hablando...mmm chicha y una siesta... me gusta eso... muy bien hermanitas apurémonos.

Sabía que Neculman le agradaría la idea, si algo tenia de mal mi hermanito es que él podia dejar todo por la Chicha, a diferencia del resto de mis hermanos y mi padre. Y más encima traidor, porque quiere a los wingkas, si mi padre supiera, luego pensé con rabia… se merece su hijo…

Caminamos con prisa por el bosque, yo afirmando a Pire, quien permaneció en silencio todo el camino, imagino porque sentía mucho dolor, pero era tan orgullosa que no demostraría a Neculman su malestar

-Dime hermano, que hay más allá del rio. Tú has ido con nuestro padre a otros lof… ¿están muy distantes?

¿Porque lo preguntas?, respondió Neculma - por nada, simple curiosidad- le respondí.
Si, Algo, como dos días a caballo, pero deben cruzar el bosque, nuestro padre conoce muy bien el camino, si hubiera ido solo me hubiera costado llegar. Porque el bosque es muy tupido en esa área, y casi no hay luz. Concluyo sin muchas ganas de continuar conversando.

En eso mi hermana me susurra, ese es el bosque de mi amado, en medio de él hay un claro, junto a un manantial, me llevaba en sus brazos con la rapidez de un rayo y ahí él me demostraba su amor, dijo embelesada por sus recuerdos…

Que cuchichean, pregunto Neculman… me imagino que aburrido de sus pensamientos.

Una conversación entre mujer, hermano... al parecer Neculman le pareció menos interesante, y sabia que no podía interferir porque nuestra tradición se lo impedía… continuo en silencio hasta que llegamos a la Ruka.

En cuanto llegamos mi hermano exigió su Chicha, la cual le di en abundancia, hasta que se fue a dormir al establo para que mi padre no lo pillara lo bebido que estaba… será flojo, pero no tonto pensé. Por lo menos sabia que él no nos molestaría mas…

En cuando se fue, Pire se recostó en su ngütantu[7], hermanita me siento muy mal. Corrí, y le acaricie el rostro. –Hermanita, te tengo una mala noticia- le dije. -¿Qué pasa? Se incorporó.

- Oh, hermanita, escuche al Machi Minchequeo, decirle a otro hombre que los espíritus le habían avisado que en tu vientre tienes un demonio, y vendrá al amanecer a sacrificarte para que tu An se lo lleve. Tenemos que partir antes que lleguen.

Pire, palideció, como si eso fuera posible… Pero Huilen, nuestros padres, nuestra familia me defenderá- dijo. Traté de no hacer una mueca antes sus palabras…

Pire, hermana... el machi no vendrá solo, pondríamos en peligro a nuestra familia… Quieres eso, le mentí. No tenía corazón para decirle la verdad… Después cuando estemos a salvo, avisare a los nuestros donde estamos para que nos ayuden.

Pire, me creyó. Y me dijo, está bien, partiré ahora, tratando de incorporarse con dificultad de la cama. No hermana le dije... partiremos… no te dejaré sola, dije con valor.

-No hermanita, estarás en peligro, si nos pillan también pueden hacerte daño- contestó. No Pire, no te dejaré, y no nos pillaran- finalice.

Pire vio la determinación en mis ojos, de acuerdo Hermanita, debemos ir donde mi amado, él nos protegerá. Él es un espíritu del bosque, y su magia alejará a todos y estarnos a salvo. Debemos ir a su bosque, termino diciendo.

–Entonces así será… Neculman dijo que pasado el rio hasta antes de llegar al otro lof hay dos días a caballo. No tenemos caballos para llegar, calculo que serán 2 días a pie tal vez más para llegar al  bosque. Buscaré alimentos para el viaje, tu descansa, ya está cayendo la tarde pronto llegara nuestra familia.

Revise  nuestra área de la ruka recogiendo lo que podía llevar una frazada, piñones tostados, agua, el arco y las fechas, una onda, un cuchillo, finalmente decidí revisar las cosas de la otra esposa de mi padre, no era nuestra costumbre ver o tomar sus cosas, ni transitar en su espacio, pero eso después de hoy no debiera importarme mucho por las consecuencias que tendría si era descubierta… que me puede servir pensé… colgado en su fogón había algo de carne ahumada, saque un poco pues ellos eran numerosos, mi rabia no era contra ella y sus hijos...cuando lo descolgué del techo, mis ojos encontraron  las lawén [8], sabía que las necesitaríamos después del parto de Pire. Pues la otra esposa de mi padre las había tomado cuando nació mi otro hermano. También había maqui, que bien, pensé. Con el aceite de las hojas trituradas sobaría la guatita[9] de Pire, eso ayudaría a calmar sus dolores.

Cogí un yapaq[10] de mi padre e introduje todo los alimentos, me cargue de todo lo que podía llevar para que Pire no llevara nada, por temor a que tuviera un koñiwe kutran[11] y se dificultara aun más nuestro escape.

Corrí donde Pire... Ya hermanita vámonos... Cubrí a Pire con una manta liviana de su cama, si bien éramos mujeres fuertes, en la condición de Pire, un enfriamiento podría ser peligroso en su estado.

Pire me miro y me dijo - gracias hermanita… te amo… -Ay, hermana, yo también, pero no hay tiempo para hablar… ¡vamos! le urgí. Y nos alejamos rápidamente de la que hasta ese día era nuestra Ruka... nuestro hogar…

Capitulo 1: La Sentencia.


Tenemos que correr-, pensaba  preocupada Huilen[1], mientras a escondida  se alejaba rápidamente de la ruka[2] de su familia. En dirección al monte. Tenían que escapar antes de ser descubiertas.

- Cuando mis padres y hermanos se percataran que habíamos huido, estaba segura que si nos pillaban yo recibiría una zurra memorable, si es que no algo más grave, pero lo que me preocupaba mas, era la seguridad de Pire, ya que la matarían, porque sabían que en su vientre llevaba al hijo de un Huitranalhue[3].  ¡Apúrate Pire!, le susurre, no quería que se despertará Neculman.

Más abajo con mucha dificultad corría Pire, su rostro denotaba el gran esfuerzo que hacía, y el dolor que esto le significaba. ¡Ya voy lamngen![4]- jadeó. Me devolví a ayudarla a subir, no teníamos tiempo, el atardecer comenzaría y regresaría nuestra familia, teníamos que alejarnos lo más posible, para que no nos dieran alcance.

No podía dejar de recordar que con los  primeros rayos de sol el Machi[5] llegaría a la Ruka para hacer el ritual de eliminación del huitranalhueito[6] y la muerte de mi hermana con ella.

¡Porque justamente hoy había tenido que ir el Machi Minchequeo al mingako[7]!-me decía frustrada- En cuando lo vi llegar, supe que tendríamos problemas y Pire sería descubierta. Simplemente porque ella destacaba entre la gente, su bella figura, su clara piel como la nieve, su largo cabello negro azulado trenzado, que enmarcaba una hermosa cara y unos vividos ojos castaños rojizos[8] que aunque tenían unas ojeras oscuras, en nada aminoraban su belleza... La presencia de Pire hechizaba a quien tuviera cerca y por eso le era imposible a Minchequeo no quitar su mirada de mi lamnge, en ese momento sentí que los espíritus le susurraron algo su oído… paso un momento sentí que todo se detenía- la descubrieron me dije. Vi como se acercaba a Pire  y como observaba el moretón que se formaban espontáneamente en su brazo interno, y su vientre que se movía notoriamente… su bebé había golpeado el brazo de mi lamnge desde el interior de su gatita...mientras mi hermana contenía la respiración por el dolor. Rápidamente me acerque para cubrirla disimuladamente con mi cuerpo y en voz alta le pedí que fuera a buscar agua al rio para sacarla de la vista del Machi. Sin embargo, Minchequeo no es una persona fácil de engañar, e inmediatamente fue a interrogar con mis padres.

Solapadamente los seguí, y me escondí entre los árboles para escuchar su conversación.

-       Mari Mari  pu peñi.[9] Los saludó.

-       Curiman, Saqui disculpen haberlos alejados de sus deberes, pero necesito hacer algunas preguntas sobre Pire, he notado cosas extrañas en ella- Y los espíritus me están avisando de un peligro dijo.

Mi padre Curiman muy extrañado le contesta-  Mari Mari peñi [10]¿Que necesitas saber? Pire es  una muchacha normal, ¿Qué cosas extrañas has visto en ella? ¿Qué peligro?

Minchequeo, miro fijamente a mi madre, ignorando las preguntas de mi padre. ¿Y tu domo che[11]?, ¡es muy importante! Urgió el Machi. Mi madre nerviosamente bajo la mirada. Mi padre le pregunta… ¿Qué cayas domo che… porque no respondes a Minchequeo?

Nada sé, respondió. –Mientes-  le dice el Machi, con una fría voz.

-Cuenta Saqui, ¿qué temes hablar?...  le exige mi padre.

Grandes lágrimas comienzan a salir de los ojos de ella, y entre sollozo contesta. -Vi a Pire, matar una Achawal[12], morder con desesperación su cuello y beber su sangre. Te acuerdas que pensábamos que un nguërü[13] entraba a los corrales. ¡Era nuestra hija! ¡Creo que la poseyó un Wekufe [14]! Y su vientre está creciendo cada día, debe tener algún mal, le he preguntado y ella nada dice, pero tengo miedo de preguntar de porque ha matado a la Achawal… término entre sollozos.

¡Cómo no me has dicho mujer!, Grito desesperado mi padre.

Oh, pu hu peñil,-se quejo el machi-  su hija no ha sido poseía por un Wekufe. Sino por algo peor, he visto sus marcas en el cuerpo, y los espíritus me lo han dicho que lo me cuentas ya ha pasado antes… Ella ha sido hechizada... Es la mujer del Huitranalhue y pronto nacerá un huitranalhueito. Toda tu familia y nuestro lof corren peligro. Debemos destruir a ese ser pronto.

¿Pero cómo? Pregunta mi padre… Minchequeo lo mira fría y solemnemente, le responde. Mañana al amanecer hare una ceremonia en tu ruka. Y sacrificaremos a Pire, para que su An[15] se lleve al demonio.

Ahogue el grito que quería salir de mi boca con ambas manos, nadie me escucho... Vi como mi madre sollozaba más fuerte y el semblante de mi padre se transformaba en una roca, sin ninguna expresión. Pesé, ahora él se negará... porque el ama… la defenderá.  Pero mi corazón se detuvo cuando le escuche decir... Así se hará... ¿Cómo lo preparemos?.. Mi madre lo miro, pero no dijo nada, solo lloraba.

-No te preocupes- Yo me encargaré de todo, traeré a otros hermanos para ayudarnos con la tarea. Es importante no poner de aviso al Huitranalhue y a su hijo no nacido. Pire no debe saber nada.

-Mujer deja de llorar- dijo mi padre. Y anda ayudar a cosechar. Mi madre se seco sus lagrimas, miro a mi padre y se despidió del Machi -Peucayal Peñi-[16] y partió sin esperar respuesta.

Me quede en silencio, y quieta hasta que mi padre y Minchequeo se alejaron, no pude continuar escuchándolos pues no deseaba creer lo que había oído, en todo este momento espere que alguno de mis padres se opusiera, la defendiera… pero nada solo  aceptaron la condena como si fueran ganado, seguían el camino trazado por Minchequeo, sin pelear por la vida de su hija, sentí que algo en mi corazón se quebró.  Tan pronto cuando se perdieron de mi vista las lagrimas inundaron mis ojos y los sollozos no abandonaban mi garganta. –No puede ser, me decía… NOOO… no puedo permitirlo… Van a matar a mi hermana...Lloré…y sofocadamente grite.. NOOO... ¡NO PUEDO PERMITIRLO!- No me importaba el Huitranalhue, ni su hijo, ni mi familia, ni mi loft… solo mi hermana. Debía salvarla. Tenemos que huir ahora, más adelante vería como deshacerme de demonio, pero antes debía salvar a mi lamnge.

Con esa idea en la mente, traté de calmar mi alma. No podía decirle a Pire que nuestros padres habían consentido en matarla, eso le destrozaría el corazón. Tenía que preparar todo para la partida de  Pire y la mía. Pues de ninguna manera dejaría a Pire sola. Seque mis lágrimas, fortalecí mi espíritu y me comencé a buscar a Pire, en mi camino encontré un Pewen[17] y con respeto lo abrace. Y con todo el corazón le pedí a Ngenechén[18] que nos protegiera a Pire y a mí, y cubriera con una venda a quienes querían hacer daño a mi hermana para poder escapar. Finalmente, partir mi camino, e inicie mi destino…

Prologo

Basado en los personajes del libro Amanecer de la Sra. Stephenie Meyer.

El porqué de su título.

Kuru küyen significa en mapudungun Luna negra, que es la fase en que ella no es visible desde la tierra durante la noche.

Nahuel ha permanecido siempre  ahí, pero escondido a nuestros ojos, esperando hacer su  aparición, el cual sin proponerselo literalmente iluminara a la familia Cullen. Igual que lo hace la luna en la noche.

Pero antes, deberá vivir oculto por la oscuridad y la bruma  del tiempo junto a su eternamente joven tia Huilen. Emprendiendo así un viaje desde sus orígenes como inmortales, hasta que finalmente cuando Alice llegue a su puerta para solicitarle ayuda...

Algunas Palabras


LA HISTORIA DE NAHUEL

Basado en algunos de los personajes  y escenarios del libro Amanecer de la Señora Stephenie Meyer, dueña de los derechos de autor de estos. Salvo estos, el resto de los personajes, locaciones y trama han sido de mi humilde creación.

Debo indicar que es la primera vez que intento escribir algo, así que ruego su comprensión. Lo cual hago con mucho entusiasmo, pero como también esto me ha costado mucho, si alguien quisiera hacer uso o publicar esta historia, o hacer uso de los personajes que he creado,  previamente  debe solicitar mi Autorización y hacer referencia, de mi autoría.

Breaking Dawn Movie